viernes, 14 de septiembre de 2012

Mi venganza


Tu locura adorable me persigue,
tus ideas descabelladas,
tus historias locas,
tus ocurrencias,
tu risa malévola,
el sonido de tu corazón agitado por mi cercanía,
tu respiración en mi cuello,
tus manos en mi cintura,
el viento fuerte cuando estábamos juntos,
la luna llena de una noche,
el sol radiante de la mañana,
las madrugadas rojizas que me hacía sentirte cerca,
el humo del cigarrillo que tanto adiaba y ahora me sabe a dulce,
me hace recordarte,
tus frases irónicas,
tu fría crueldad aún cuando la usabas contra mí,
tu pesimismo,
tu manera de contarme libros,
detallando en cada nombre
y asegurándote de que yo no los olvidara como a todo,
tu voz cuando era pasiva,
tu manera de detestar lo que yo amaba,
tus quejas, tus reclamos,
tus bromas,
tus chistes,
tu voz cuando no me hablabas a mí,
que siempre era diferente,
esa que ahora tengo que soportar cuando me diriges la palabra,
tu arrogancia,
 tu manera de contradecirme,
tus chantajes,
tu mirada al vacío mientras fumabas, ignorándome,
tus anécdotas,
la curva de tu sonrisa,
tu pesimismo,
tu manera de acariciar suavemente mis pómulos,
tus pequeñas pataletas,
tus rotundos no,
tus ojos oscuros que amaba ver de cerca,
mi rostro en frente del tuyo,
mi nariz rosando la tuya,
nuestras bocas que nunca se decidieron…
tus pestañas oscuras,
tu cabello castaño,
el silencio del riachuelo circulando cerca a tu casa,
tus advertencias,
tus amenazas….
ahora que lo pienso existen aún más cosas que amo de ti,
pero que quisiera odiar,
más eso no impide que desee vengarme por lo que siento,
esperando (y no queriendo)
que como decía el libro,
no puedas olvidar a esta escorpiona,
y que como a mí,
te persigan cada uno de mis gestos
y mis recuerdos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario